Análisis de la participación de Dozer en la Red Bull 2018

En su quinta participación en la final nacional de Red Bull Batalla de los Gallos (BDG), Dozer se coronó campeón de la competición celebrada el pasado sábado 4 de agosto en el Luna Park. Lo que parecía imposible se materializó tras la victoria del freestyler oriundo de Don Orione sobre Alkoy, Nova, Sub y Stuart.

Era difícil predecir que Dozer sería el segundo representante argentino en la final internacional de la BDG que se realizará a fin de año en nuestro país (acompañará a Wos, subcampeón mundial). MC’s como Papo, Klan, Cacha o hasta incluso Nacho eran considerados como los posibles ganadores de la noche. Sin embargo, Dozer, quien siempre mantuvo sus ideales y su constancia a la hora de rapear, logró escabullirse hasta llegar a la victoria.

Sin intenciones de desmerecer a nadie, los rivales contra los que se enfrentó pueden considerarse como relativamente simples, teniendo en cuenta que esta RBG contó con representantes de varias provincias que muchas veces están por fuera del mainstream de la escena (Mendoza, Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires). Al mismo tiempo, los rivales más difíciles y posibles candidatos prácticamente se eliminaron entre ellos o perdieron en las primeras fases de la competición.

La final contó con Dozer y con Stuart, un MC que se encuentra en el último puesto de la Freestyle Master Series, liga de freestyle que se realiza en el país y que cuenta con diez raperos que fueron elegidos por la organización que produce el evento. Actualmente, el santafesino se encuentra en la zona de descenso de la competición, cerca de perder el puesto.

Aparecen dentro de la escena muchos freestylers que estén en un nivel igual o mayor que el de Dozer, pero la mayoría de ellos por algún motivo u otro no participaron de la competencia. Que no se malinterprete: nuestro flamante campeón no nos quita las chances de salir victoriosos en el encuentro de fin de año, pero posee algunos puntos en contra que pueden hacer que abandone la competencia en las primeras rondas.

A pesar de ser un MC completo que cuenta con buena fluidez y dicción, manejo de distintos flows, doble tempo, y buena capacidad para realizar punchlines, su fanatismo religioso puede llevarle a pasar un mal trago. Nadie le pedirá que deje de lado su religión, pero considerando que es el primer “punto débil” que uno conoce del competidor, será sin dudas el recurso con el que más lo ataquen. Así como en todas las competiciones nacionales recibe acotes sobre esta temática, lo mismo le ocurrirá en la final internacional.

Al mismo tiempo, ya es parte de su tradición. Cuanto más fuerte y duro sea el acote sobre su religión, más contundente puede ser su respuesta. Todo dependerá de que tan inspirado se encuentre a la hora de la Internacional que se realizará a fin de año en nuestro país: la localía puede ser un punto fundamental… ¿tiene lo necesario Dozer para ser campeón mundial?